Los bondis hacía rato que se habían retirado a descansar y por eso volvía desde el centro caminando. Era una caminata que ya había hecho en otro momento. Nada grave, una media a hora pateando es un ejercicio que nunca viene mal. Más aún si tenés que destilar el alcohol en sangre.
El único trayecto del recorrido más "intimidante" es la última parte de la Avenida Karangahape (Karangahape Road) que, por su nombre rebuscado, en común acuerdo todos la llaman K' Road. Al pedo semejante nombre si cuando ves el recorrido del bondi dice K'Rd (Rd abreviatura de Road), o lo mismo cuando leés las direcciones de los locales sobre dicha avenida.
Les decía...es la parte más intimidante por su conocido espacio de prostitución, que, entre nos, son 3 o 4 gatas/travas locas que deambulan y más que mirarte seductoramente y hacerte muecas con el labio y su bigote mal afeitado, no pasa.
Pero yo ya había pasado esta parte, estaba deambulando ahora por la Avenida Richmond, Avenida que conecta con la calle de mi casa.
Yo digo que Auckland, más que ciudad, es una ciudad pueblo. Fuera de lo que son las 10 o 15 cuadras céntricas, dominada por Queen Street (la Santa Fe porteña), el resto, más allá de unas cuantas cuadras a la redonda de esta avenida, pierde todo registro de ciudad. La geografía se comprende por casas bajas, a lo sumo edificios tipo duplex. Pero, en general, todo se dispone en formato barrio. Casas prolijas, techo de tejas a 2 aguas, de madera, pequeños jardines, veredas anchas y calles arboladas.
El introvertido barrio de Grey Lynn, a las 2:27am, estaba totalmente retraído. Cada auto guardado en su lugar, los faroles de calle iluminando tenuemente la vereda y el viento que susurraba. Mientras tanto, la luna posaba borroneada y paciente sobre las nubes, las cuales, como un manada de elefantes tranquila, surcaban el cielo dejando, de vez en cuando, entrever alguna que otra estrella. No se escuchaba ningún ruido en ninguna casa. A veces pienso que, a no ser por algún que otro auto que viene a romper el balance perfecto entre luz-sombra y sonido-silencio, parece un pueblo fantasma.
Tranquilo, escuchando mis pasos y algún que otro tarareo mental para entretenerme, avanzaba hacia mi destino final: la cama.
Sorprende ver como las casas no tienen rejas (salvo raríiisimas excepciones). Mi mirada se detuvo en una de ellas. Quizá me llamó la atención porque no parecía estar tan bien conservada como las demás. Su color pálido resplandecía como los huesos fosforescentes en la noche en medio del campo. El farol de calle más cercano estaba roto y el siguiente muy lejos para alcanzarza, así que sólo era iluminada por la débil luna.
Su cerca de alambre y caño de pintura vieja - que contradecían a las tradicionales y prolijas cercas de madera - precedía a una escalera que conducía al porche de entrada, donde yacía un sereno banco de plaza. El marco de la puerta, también algo deteriorado, albergaba una minúscula puerta con un peculiar llamador cobrizo de una deforme cara. Sobre esa lomada, esta casa de 2 pisos y techo a 2 aguas sobresalía a las demás. La misma lucía 2 grandes ventanales, uno en la planta baja estilo 'bow window' y el otro rectangular normal, con un único vidrio, simétricamente ubicado en la planta superior. El ventanal inferior estaba cubierto por pesadas cortinas, no así el de arriba. Este dejaba ver apenas un pasillo y en él, el borde una puerta entornada. Nada más podía apreciarse en este interior que se consumía rápidamente en penumbras. Sin darme cuenta había detenido mi paso. Salgo de mi trance, bajo mi cabeza y miro hacia adelante. En la siguiente esquina me aguardaba "El Tunel", como me gusta llamarlo. El Tunel es el producto de una especie de Ombú, viejo, de anchas raíces que, irrespetuosas, se extienden adueñándose de todo a su paso. Con la vereda levantada y coartada debajo y, por encima, el espeso manto de hojas de este árbol se forma un tunel de impenetrable oscuridad, como un ajugero negro que espera succionarte. Yo, cada vez que lo cruzo, me repito una y otra vez a medida que avanzo por el interior del mismo: "Esto es NZ, es seguro...el cuco NO existe."
Con la tradicional cara de julepe y gritando para mis adentros el pensamiento que les mencioné, alcé mi pie disponiéndome a continuar camino, cuando, sin el mas mínimo previo aviso, siento un fuerte golpe sobre el ventanal, tan fuerte como si intentaran romperlo. Miro hacia arriba y una nena, de unos 10 años, de pelos largos desalineados, mirada perdida, solloza, pálida, con su boca entre abierta y el camisón de algodón manchado, dejaba marcado el vidrio con su mano deslizándose lentamente mientras éste chillaba. Mis piernas se cargaron el equipo al hombro y soltaron el embriague en primera, furiosa, arando como Fórmula 1 en la largada. Me acercaba a la esquina, salto el cordón - creo que lo volé bajito - y entro al tunel: "No hay cuco!...no hay cuco!...no hay cuco!!!!"...
Una vez escuché que el peor error que podés cometer huyendo es perder tiempo mirando hacia atrás...yo miré. En medio del profundo abismo, mis pasos desaceleraron y me di vuelta. Una silueta a contraluz, desgarbada, de pelos largos, estaba parada en la vereda descalaza a unos 40 metros de frente a mí. Cabe destacar que, sin consultar a mi cerebro, mis piernas volvieron a tomar la decisión y me precipité en una corrida triunfal. (Me hubiera gustado ver si estos Jamaiquinos olímpicos se atrevían a desafiarme en los 300 metros llanos!...boluditos!)
Doblé en la calle de mi casa como venía, tomé la curva sin siquiera arrimar mi pie al freno. (Si lo quisiera hacer consciente seguro derrapo y quedo volcado contra el buzón de alguna casa vecina)
Sin aminorar la velocidad, abro la cerca de mi casa, digito la clave para entrar tan rápido q no ví mis dedos (no, no tengo llave, sino un cerrojo eléctrico con clave), entro a mi pieza, cierro la puerta, las ventanas, bajo las cortinas, me desvisto casi arrancándome la ropa como stripper y me meto a la cama bien bien tapadito con la colcha cubriéndome la cabeza hecho un bollito...Mañana será otro día, dulces sueños............me cago en el cuco!
3 comentarios:
Chabong, te fijaste el alto porcentaje de relato en donde: O estas borracho; O estas escapando con el trasero rebosante de cuestionamientos?, esto me está preocupando, tomá todo lo que quieras, pero no te dejes agarrar!!!!!
adhiero al comentario de pablo (castaño me imagino, por la cordura y sinceridad de sus palabras).
dejá de tomar cosas raras!!!!!!!!!!
y acordate lo que le dijieron fleco y male al dr. miroli:
"drogas... ¿para qué?"
leandro (el cabe)
No se preocupen, tengo un detector de peligro instalado en el upite. Cualquier intento de acercarse más de lo debido a mi persona (especialmente por la parte posterior) se activa huyo raudo...como se han podido percatar.
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