Un fotógrafo que ya no quería disparar, un periodista que no quería tomar el micrófono, unos bombos que ya no querían sonar, unas miradas cruzadas en busca de una explicación que jamás llegará y que poco sentido tiene buscarla....Un obelisco vacío.
Todavía sigo sin entender cómo pudo haber sido el 4-0. Hasta las estadísticas parecen afirmar que el resultado no cierra con la lógica matemática...o sí?
Como yendo a rendir un final habiendo estudiado hasta el último rincón del libro, nos sentíamos seguros. "8 puntos" decía Maradona que estábamos, y la alegría de un Brasil eliminado, abrían el camino a tener rivales "menos" duros que nos acercasen a ganar la copa después de tanto tiempo. Ese himno que coronó la Italia '90 se hacía sonar más fuerte y con ella la mirada nuestra puesta en la final, sin escalas.
Brasil-Argentina era la final soñada, donde encima destronaríamos al 5 veces campeón del mundo, al dueño del "jogo bonito", para reafirmar ante el mundo que fútbol es sinónimo de Argentina. Que en esa lista de temidos y favoritos, el trono, se comparte con Brasil, en todo caso, pero menos? Nunca. Cómo puede ser que coronemos de gloria el fútbol europeo con nuestros jugadores pero a la hora de tenernos en cuenta parece que entrásemos en la lista porque sobraba una vacante? Era hora de reclamar nuestro lugar.......era hora.....y no fue.
Brasil había tenido su merecido. Subestimó a un Holanda, ni más ni menos, que sí, se plantaba en la cancha como inferior en todo el primer tiempo, pero olvidar que es una selección con una indiscutida trayectoria futbolística es un pecado.... Y el pecado se paga.
"Estamos 8 puntos"...."Tenés miedo?"....decía ese Maradona confiado. Y ahí me entraron las dudas. Dudas que nadie quiere admitir hasta encontrarse con la realidad. Pero si Brasil, con semejantes jugadores, con un primer tiempo donde era el ganador indiscutido, pecó de sobervio, por qué nosotros íbamos a tener diferente final, si sobervia, de la mano del Diego, nos sobra?
Y después de ese gol tempranero, cuántos esperamos el milagro? Ver a ese Messi corriendo desde la mitad de la cancha y hacer el gol del triunfo para que pongamos otro video en youtube con el relato de Victor Hugo del mundial '86. Pero claro, 24 años pasaron de Maradona '86. Messi que es tan humano como el Maradona que se comió el penal en Italia '90, y los Alemanes, que si hay algo que van a saber hacer es analizar hasta el último detalle al rival, hicieron lo que tenían que hacer: no lo dejaron jugar. Construyeron otro muro de Berlin frente al arco y "cruzá si podés!". Nosotros mostramos 4 veces que podíamos tropezarnos con la misma piedra. Porque las jugadas de gol parecían calcadas.
Quizá veía realmente que esta selección era candidata, como hacía rato no veía. O...bue, quizá siempre la vemos candidata a través de los ojos de esa pasión incondicional....Pero otra vez tendremos que esperar 4 años. Remarla. Y, cuando llegue el próximo mundial, lo bueno de todo esto, es que esa pasión va a seguir intacta, que los comerciales de Quilmes nos van a pegar igual, y que una vez más nos vamos a permitir soñar.
Pero la que viene, seguro, es nuestra, eh!
VAMOS ARGENTINA CARAJOO!!!!
PD:
- Pero profesor, yo no sabía que tenía que leer el Anexo del libro!
- Si está en el libro, Ud. cree que es para nada?
- No le puedo decir otros capítulos? Me sé todo, le juro!
- No, vuelva la próxima fecha...en 4 años.
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